Desde la página de Wikisaber nos acercan, en entrevista con Óscar Espiritusanto, fundador de PeriodismoCiudadano.com, los entresijos de este «observatorio alrededor de todo lo que ocurre en el entorno del periodismo ciudadano», así como del fenómeno en líneas generales.
Entre los hitos más destacados nos encontramos con las manifestaciones del Movimiento 15M o las recientes revueltas vividas en el norte de África, (Libia, Túnez y Egipto):
Cada vez tiene más fuerza y es más importante dentro de la cadena informativa, simplemente con fijarnos en las ultimas revueltas en el norte de África, podemos darnos cuenta de la gran importancia que tiene la información generada por los propios ciudadanos, sin estos periodistas ciudadanos armados con las herramientas adecuadas para informar y el canal de distribución global que es Internet, nunca hubiéramos sabido que esto estaba ocurriendo.
El periodismo ciudadano se convierte en un nuevo vigilante del poder. El cuarto poder (los medios) y los Estados están ahora vigilados por un quinto poder disgregado y ubicuo: los ciudadanos. Rachel Sterne, CEO de GroundReport, habla del periodismo ciudadano como de “un quinto poder que vigila a los periodistas y grandes medios”. Es, además, una herramienta de vigilancia electoral y política, especialmente en los países con una censura férrea o en situaciones de una especial agitación social. Irán se convirtió en un buen ejemplo de ello tras las protestas postelectorales de 2009. Aporta información de gran valor en situaciones de crisis: atentados terroristas, desastres naturales, conflictos armados y se ocupa de temas que los grandes medios olvidan y no muestran en su agenda, es una potente herramienta de defensa de los Derechos Humanos y de las minorías. Global Voices online o Witness así lo demuestran.
Espiritudigital destaca la importancia de la Web 2.0 en la aparición del periodismo ciudadano, pero este no es el único factor, ni tampoco el más importante:
«Puede parecer obvio pero la tecnología en sí cambia pocas cosas, lo importante son las personas que están detrás de esas herramientas. No puede existir una Twitter-Revolución sino se dan numerosas circunstancias para que ese movimiento se dé y si no hay detrás de las herramientas auténticos revolucionarios. Las herramientas son importantes pero las personas que están detrás de ellas son imprescindibles.»
«Pero sin duda la web 2.0 ha democratizado el acceso al conocimiento, las herramientas y el canal de distribución, cualquiera puede informar e informarse casi en tiempo real. Esto cambia el parámetro básico de un emisor varios receptores, ahora el emisor puede ser receptor y viceversa, pasamos del monólogo al diálogo.»
Sobre la tan recurrente rivalidad entre el periodismo ciudadano y el tradicional apunta:
«El periodismo ciudadano, es una evolución positiva de la comunicación que permite a periodistas ciudadanos y tradicionales colaborar para generar mejores piezas informativas.»
El discurso de que “el periodismo ciudadano terminará con el periodismo tradicional” es una afirmación que se ha difundido especialmente desde la industria informativa, nunca desde la audiencia o desde los que defienden la participación activa de los usuarios en los medios. No podemos “criminalizar” o desacreditar a la audiencia por que desee generar piezas informativas. Más bien al contrario, se debería, desde la profesión periodística, alfabetizar en la participación a la audiencia y poner en sus manos las herramientas necesarias para que colaborando y compartiendo información se generara mejor periodismo.
Puedes leer la entrevista al completo en: Wikisaber