La solicitud de la administración Trump de extraditar a Julian Assange a Estados Unidos, en donde deberá enfrentarse a 18 cargos de espionaje penados con hasta 175 años de cárcel, ha iniciado un intenso debate sobre la legalidad de esta decisión y sus repercusiones en el ámbito de la libertad de prensa y los derechos humanos.
Tras la filtración de miles de documentos confidenciales del Departamento de Estado en 2010, la situación de Assange no ha parado de empeorar. ¿Dónde están ahora los medios que obtuvieron una tremenda repercusión mediática gracias a los cables filtrados que revelaron los crímenes de guerra en Irak y Afganistán, las detenciones extrajudiciales en la prisión de Guantánamo o los cables que permitieron denunciar la violación de derechos humanos en todo el mundo?
¿Por qué entonces no vemos en las páginas de los medios más alegatos en defensa de la no extradición de Assange? ¿Qué consecuencias pueden devenir del actual precedente que la condena de Assange podría traer al mundo del periodismo y la libertad de prensa? A este respecto Naom Chomsky y Alice Walker afirman en Pagina12:
la administración Trump lanzó el ataque más peligroso contra la libertad de prensa en al menos una generación al acusarlo de publicar documentos del gobierno estadounidense.
Un destacado número de representantes del mundo del derecho entre los que se encuentran más de 150 políticos, abogados y jueces, además de 13 ex presidentes, piden al primer ministro del Reino Unido que actúe en conformidad con el derecho nacional e internacional, y respete los derechos humanos y el estado de derecho, poniendo fin a los procedimientos de extradición en curso y procedan a la liberación de Julian Assange:
Numerosas organizaciones de defensa de los derechos humanos como Reporteros sin Fronteras o Amnistía Internacional rechazan la extradición de Julian Assange a EEUU. ya que, según Amnistía: «estaría seriamente expuesto a sufrir violaciones de los derechos humanos», y solicitan la retirada de sus cargos.
Reporteros sin Fronteras no sólo solicita su liberación inmediata por razones humanitarias y condena la incesante persecución de Assange, sino que destaca el peligroso precedente que puede sentar el hecho de que se condene a una persona por sus actividades periodísticas.
A esta condenan se suman otras muchas organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos y la libertad de prensa como El Comité para la Protección de Periodistas, (@pressfreedom), que considera que el enjuiciamiento de Assange «amenaza con criminalizar las prácticas más básicas de denuncia», poniendo así en riesgo la libertad de prensa:
No olvidemos que la contribución de Assange con sus filtraciones fue reconocida en 2011 en los Walkley Awards, estos premios son para el periodismo australiano lo que los Pulitzer en Estados Unidos. Entre los ganadores de la edición 2011 se encontraba Wikileaks, galardonada en la categoría de “Contribución más destacada al periodismo” . Assange recibió en el 2009 el Amnesty International UK Media Awards 2009 (New Media) por exponer los asesinatos extrajudiciales en Kenia distribuyendo y publicando la investigación de Kenya National Commission on Human Rights (KNCHR) Kenya: The Cry of Blood – Extra Judicial Killings and Disappearances, entre otros muchos reconocimientos internacionales.
Desde PC os animamos a conocer mejor la figura de Assange y la relevancia histórica de su trabajo consultando aquí algunas de las filtraciones más destacadas de Wikileaks o a través de algunos de sus libros publicados como:
También puedes acercarte a la figura de Assange a través de algunos de sus libros como:
«When Google Met WikiLeaks». Este trabajo viene cargado de polémicas y graves acusaciones contra el imperio Google y sus «supuestas» relaciones con el gobierno de EE.UU. En este trabajo Julian Assange detalla la conversación mantenida con el presidente de Google, Eric Schmidt en Norfolk, Inglaterra, donde se encontraba viviendo bajo arresto domiciliario en junio de 2011.
El libro de Assange coincidió curiosamente con el de la publicación de uno muy similar del ex presidente ejecutivo de Google, Eric Schmidt, con una portada casi idéntica, titulado “How Google Works,” escrito en colaboración con Jonathan Rosenberg.
«Cypherpunks» es otro de los títulos a tener en cuenta escrito por Assange junto a otros tres autores: Jérémie Zimmermann, activista especializado en criptografía informática, Jacob Appelbaum, portavoz de The Tor Project, un proyecto para garantizar el anonimato en línea del que os hemos hablado en PC y Andy Müller-Maguhn, portavoz del club de hackers Chaos Computer Club. Cypherpunk es el nombre de ciertos activistas de la criptografía informática
Un trabajo escrito en respuesta a sus preocupaciones sobre el control y la vigilancia gubernamental de Internet. Dos de estos activistas, además del propio Assange, sufrieron represalias como resultado de su trabajo.
El libro surge de las conversaciones mantenidas en marzo de 2012 entre Assange y tres destacados cypherpunks, ciberactivistas o criptopunks: Andy Müller-Maguhn, Jérémie Zimmermann y Jacob Appelbaum.
También puedes consultar aquí, todo lo publicado en PC sobre Assange.