Dos tercios de los periodistas asesinados en todo el mundo en el año 2014 fueron asesinados en zonas de guerra. En 2015 sucedió exactamente lo opuesto. Dos tercios de los periodistas fueron asesinados en países «en paz». Estos crímenes sucecieron, incluso en las capitales, lejos de conflictos armados, como sucedió en el atentado en París contra la sede de Charlie Hebdo, el pasado 7 de enero. Este es uno de los grandes cambios que denuncia Reporteros sin Fronteras en su «Round-Up Of Journalists Killed Worlwide», un informe en el que analiza las circunstancias y el número de periodistas, tanto profesionales como ciudadanos, asesinados en 2015.
787 journalistes ont été tués depuis 2005 en raison de leur profession (110 en 2015) #pressfreedom pic.twitter.com/WjERHZ2jNb
— RSF (@RSF_RWB) enero 8, 2016
Según este informe 110 periodistas fueron asesinados durante el ejercicio de su trabajo o por razones poco claras en el año 2015. 67 de ellos fueron atacados por su trabajo o fueron asesinados mientras informaban. Según señalan desde Round-Up, el elevado número de fallecidos pone de manifiesto la falta de iniciativas diseñadas para proteger a los periodistas en el ejercicio de su profesión:
Estas 67 muertes elevan a 787 el número total de periodistas asesinados en relación con su trabajo desde 2005. No ha sido posible establecer con claridad las circunstancias o motivos de las 43 muertes de periodistas este año. 27 periodistas ciudadanos y siete trabajadores de medios también fueron asesinados en 2015.
Esta preocupante situación es en gran parte atribuible a la violencia deliberada contra los periodistas y es indicativo del fracaso de las iniciativas adoptadas hasta ahora para proteger al personal de los medios.
787 journalistes ont été tués depuis 2005 en raison de leur profession (110 en 2015) #pressfreedom pic.twitter.com/WjERHZ2jNb
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La violencia que todo tipo de periodistas deben soportar por ejercer su profesión no para de aumentar. Las razones de la muerte de 43 de los periodistas asesinados en 2015, no han podido clarificarse debido a la falta de pruebas. En las investigaciones realizadas existen numerosos obstáculos que impiden determinar las causas de estas muertes, tanto por «la falta de buena fe por parte de los gobiernos», como por las dificultades de investigar en regiones con regímenes especialmente represivos. Según este informe, estas «razones poco claras» reflejan el problema de la impunidad de los delitos de violencia contra los periodistas en muchas regiones del mundo (América Latina, Asia-Pacífico, Oriente Medio y África subsahariana)
Christophe Deloire, secretario general de RSF, considera «absolutamente esencial» la creación de «un mecanismo específico para hacer cumplir el derecho internacional sobre la protección de los periodistas, especialmente ante el hecho de que dos tercios de las muertes registradas fueron en países «en paz».
Francia es el país europeo en el que se registraron más muertes de periodistas en 2015. Ocupa el tercer lugar, después de Siria e Irak. El ataque de enero, de Charlie Hebdo contribuyó a una reversión de la tendencia del año pasado, cuando dos tercios de las muertes de produjeron en zonas de guerra.
2015 : après l’Irak et la Syrie, la France est le 3e pays le plus meurtrier pour les journalistes #pressfreedompic.twitter.com/IZAyaXJFU0
— RSF (@RSF_RWB) enero 8, 2016
En 2014 el Balance Anual de la violencia contra periodistas de Reporteros sin Fronteros registraba el asesinatos de 19 periodistas ciudadanos, entre los que se encontraba una mujer, periodista ciudadana asesinada en México. El actual informe supone un destacado aumento de los periodistas ciudadanos asesinados por informar, con 8 víctimas más en tan solo un año. Estos datos ponen de manifiesto la necesidad de crear también mecanismos de protección para todo tipo de informadores no profesionales, con cuyo trabajo protegen y defienden la libertad de expresión en contextos especialmente represivos.
Uno de los casos más impactantes que resgistra este informe es el del brutal asesinato de cuatro bloggers en Bangladesh. En PC os hablamos puntualmente de estos crímenes y en particular de la muerte de Avijit Roy en febrero de 2015.
No olvidemos que Bangladesh ocupa el puesto número 146 sobre 180, en el barómetro de la libertad de expresión de RSF. Estos blogueros abogaban especialmente por la tolerancia, la libertad de expresión y la libertad de pensamiento en sus blogs, único espacio en el que la gran mayoría de ciudadanos pueden leer e informarse sobre formas de pensar diferentes a las que su gobernantes estiman oportunas y convenientes.
En PC también os hablamos del asesinato de Washiqur Rahman el 12 de mayo por sus escritos en favor del laicismo y la libertad de culto.
Especialmente destacada es también la situación que periodistas profesionales y ciudadanos viven en Siria, concretamente la ciudad siria de Alepo es considerada en este informe como «un campo de minas para los profesionales y periodistas ciudadanos. Atrapados entre las diversas partes del conflicto desde 2011». En este contexto, los periodistas acaban convirtiéndose en víctimas colaterales de la guerra.
Una situación similar se vive en Mosul, ciudad controlada por Estado Islámico (Daesh), en la norteña ciudad iraquí de Mosul el grupo yihadista ha sido responsable de
48 secuestros y 13 ejecuciones de periodistas y periodistas ciudadanos en los últimos 18 meses.
Alrededor de 60 periodistas profesionales y no profesionales y trabajadores de los medios han huido de la de la ciudad, mientras que los que están todavía no pueden trabajar por temor a represalias. Reina la desinformación en este entorno. El contacto con el mundo exterior está prohibido o restringido por la IS, que también
controla las comunicaciones e Internet.
Si quieres leer la información en detalle, puedes acceder al informe: «Round-Up Of Journalists Killed Worlwide».