Josh Wolf nos habla en este vídeo de la libertad de prensa en EE.UU y de cómo afecta a periodistas tradicionales y ciudadanos.
El hecho de que los periodistas ciudadanos no estén amparados por los mismos derechos que los tradicionales, le otorga una ventaja añadida a las grandes corporaciones mediáticas.
La cuestión sobre quién es o no periodista es ya un debate antiguo. La Primera Enmienda a la Constitución de los EE.UU defiende que los periodistas citados a declarar ante un jurado, cuentan con derechos constitucionales con respecto a la recopilación de noticias y la salvaguarda de sus fuentes.
La mayoría de los estados tienen actualmente “leyes escudo”, y algunos tribunales han dictaminado que las leyes también se aplican a los bloggers.
Las cosas van cambiando poco a poco, y ya comienza a haber casos más afortunados que el de Josh Wolf, encarcelado por negarse a rebelar sus fuentes. En California el Tribunal dictaminó que tres bloggers que escribieron acerca de Apple pudieran conservar el anonimato de sus fuentes.
Wolf no se arrepiente de lo que hizo, sin embargo se cuestiona si mereció la pena pasar todos esos días en la cárcel ya que la ley aprobada tras su encarcelamiento continua siendo insuficiente.
«Estamos esclavizando a la gente por intentar, simplemente, tener una vida mejor y esto me parece un engaño».
