En este sitio hemos llevado siempre muy a gala contar en nuestro equipo tanto con profesionales de la comunicación, como con ingenieros e investigadores que mantienen relación directa con la innovación tecnológica y que se interesan específicamente por el impacto social de tales innovaciones y de las tecnologías que las facilitan; es el caso de quien suscribe estas breves líneas.
Siendo así, en ocasiones, además de los habituales casos de estudio de nuevos medios ciudadanos e iniciativas participativas en distintos ámbitos, también nos gusta traer aquí algunos de esos casos directamente relacionados con la innovación tecnológica. Este es el caso del Dr. Umar Saif, un joven profesor asociado e investigador de la escuela de informática de la Lahore University of Management Sciences (LUMS).
Este chaval de 32 años, que obtuvo su doctorado en Cambridge y que siguió estudios de posdoctorado en el MIT, es uno de los fundadores del foro ‘Dritte‘ (Development through technology), del que surgiría el grupo de investigación NEWT (Neighbourhood for Emerging World Technologies), en cuyo seno surgirían algunos de los proyectos que recientemente le han valido a Saif su inclusión en la lista de jóvenes investigadores de la prestigiosa MIT Technology Review, el TR35.
En este caso se le han considerado sus méritos al frente de algunos proyectos que «han mejorado la conectividad en los países pobres». Se trata concretamente de dos proyectos que también pueden enseñarnos algunas lecciones útiles sobre la forma en que se puede hacer innovación tecnológica más allá de los móviles de alta gama a los que estamos acostumbrados aquí las conexiones de súper banda ancha.
BitMate es uno de esos proyectos. Se trata de un cliente de BitTorrent optimizado para conexiones de muy bajo ancho de banda: hay que tener en cuenta que la conexión media en Pakistan es de 32Kbps. Este proyecto se quedó con el apelativo de uno anterior («la banda ancha de los pobres», literalmente) cuyos resultados, que eran publicados en 2007 por la ACM, servían para lanzar a principios de 2011 una realización práctica en Sourceforge.
SMSall es otro de los proyectos por los que era reconocido Umar. Una vez más, se trata de un caso que ofrece «soluciones tontas a problemas no tan estúpidos». Este servicio permite montar el mismo tipo de comunicación de uno a muchos que se realiza con las listas de correo -una de las herramientas basada en comunidad más antiguas y efectivas que existen en la Red-, pero sobre la infraestructura que ofrecen los servicios de mensajes cortos (SMS) de cualquier operador móvil y sobre cualquier dispositivo de capacidades básicas (feature phone).
SMSall es la mayor red social basada en SMS de Pakistán: da servicio a más de 2,7 millones de usuarios, organizados en más de 400.000 comunidades (grupos) y en el momento de escribir esta entrada ya ha gestionado el envío de casi 4.000 millones de mensajes, a razón de 300 millones al mes.
Sé que es difícil, pero más allá del reconocimiento personal que ha alcanzado ahora Umar Saif, es importante poner en contexto su trabajo y sus logros desde una iniciativa como Dritte, que nunca recibió ayuda gubernamental y con el apoyo decidido de su universidad, que ha entendido su papel decisivo en la formación para el desarrollo local apoyando a sus investigadores y tejiendo redes globales para la investigación, la innovación y el desarrollo tecnológico.