Dan Gillmor, en entrevista con La Vanguardia habla de internet, periodismo ciudadano y medios de comunicación. Dan Gillmor es director del Knight Center for Digital Media Entrepreneurship, en la Universidad del Estado de Arizona y también del Center for Citizen Media, de la Universidad de Harvard.
Gillmor critica a las grandes corporaciones mediáticas que «dan la posibilidad al ciudadano de enviar información, pero no le hacen caso y si la utilizan no les pagan», esto, afirma, «no es una conversación y de esta manera no se ayuda a la gente porque no hay un feedback».
Sobre ¿Qué diferencia a un periodista de un ciudadano? Gillmor dice:
Mucha gente que no se llama a sí misma periodista y no pretende serlo hace algo que forma parte del periodismo y del sistema informativo. La clave está en encontrar las cosas que son valiosas vengan de donde vengan. Valiosas desde un punto de vista periodístico porque ayudan a la gente. Lo importante es ayudar a la gente a encontrar información veraz y saber distinguir lo útil de lo que no lo es. Esa es la función del periodista profesional en cuanto al periodista ciudadano.
Sobre si los periodistas se sienten amenazados por el periodismo ciudadano, responde:
El periodista debe ser un guía de la información que hay ahí fuera y eso supone valorar, puntuar a la gente y no infravalorarla. La comunidad hace una mejor información y la información es buena en sí, no depende de quién la tenga. Esto implica asumir la competencia. Ignorar a la comunidad es una técnica horrible, es lo peor que se puede hacer como periodista.
Respecto a la credibilidad de los medios de comunicación ciudadanos, Gillmor comenta que «uno de los problemas es que el consumidor no sabe qué creer o puede creer lo que es erróneo«. Los consejos de Gillmor pasan por aprender a ser escépticos, autocríticos e investigar.
Sobre la propuesta del Parlamento Europeo de hacer un registro de bloggers Gillmor afirma:
Creo que esta idea es un reflejo del intento de controlar lo que existe fuera de los medios. No estoy de acuerdo. Es una pérdida de tiempo, el sistema estuvo diseñado por algo, el número de blogs crece día a día y sería imposible y absurdo. Lo que quieren hacer los gobiernos es controlar la libertad de expresión y no deben. Creo que la respuesta a la libertad de expresión es una mejor expresión y no una no expresión.
Vía I lavanguardia.es