Lo que en un principio se consideró un intento para acercar la actividad parlamentaria al ciudadano, se ha convertido en todo un fiasco. La nueva web del Congreso de los Diputados, fue presentada el miércoles por el presidente del Congreso, Manuel Marín, con el fin de que los ciudadanos se familiaricen con la actividad parlamentaria a través de Internet y conseguir que los ciudadanos tengan la posibilidad de consultar proyectos, intervenciones y publicaciones de un modo más fácil y sencillo, con herramientas como un buscador para realizar consultas «on-line» o el acceso a más contenidos audiovisuales.
La web ha recibido duras críticas por parte de expertos en diseño e internautas, que han detectado errores cuando la página se consulta con navegadores como Opera o Firefox, y señalan que el sitio no respeta varios principios de accesibilidad. A ellos se ha unido la Asociación de Internautas (AI), que alerta sobre varios problemas de seguridad.
La respuesta de los internautas no se ha hecho esperar y ya está en marcha la gemela guasona de la web del Congreso, es decir, el Congrezo de los estafados.
A primera vista, la página es calcada a la de las Cortes: la misma estructura, los mismos tipos de letra, los mismos colores, el logo del Congreso presidiendo la cabecera, la imagen del presidente de la Cámara dando la bienvenida… Pero, ay, el teletubby que ocupa un escaño entre sus señorías da la primera voz de alarma.
Andrés Nieto, programador y experto en desarrollo web, hace un repaso al diseño de la página en su blog en el que señala que éste no respeta aspectos básicos para hacer un sitio accesible, esto es, que pueda ser consultado por cualquiera desde cualquier dispositivo o navegador en igualdad de condiciones. Con lo que parece que la apertura informativa del Congreso a la ciudadanía no parece tan accesible como prometía.
Vía | Asociacióndeinternautas, Elmundo, EuropaPress