Cuba se ha convertido en un ejemplo singular en la blogosfera, en donde las dificultades para conectarse e informar en la red se sustituyen por creatividad, tesón e ingenio ya que «Cuba tiene el índice más bajo de acceso a Internet en las Américas» y «para la gran mayoría de cubanos, el acceso privado a Internet sigue estando restringido por ley».
El Comité de Protección de Periodistas, CPJ, nos acerca en este vídeo a los bloggers cubanos y su realidad cotidiana. Las principales dificultades para actualizar sus bitácoras que señala la abogada, bloguera y periodista independiente Laritza Diversent, autora del blog, Las Leyes de Laritza, son: el acceso a Internet, el tiempo disponible de conexión, la precaria calidad de esa conexión o su excesivo coste. María Salazar Ferro añade a estos problemas las presiones políticas que tienen que soportar este tipo de informadores. Muchos de ellos han sido acosados y amenazados para lograr que dejasen de escribir.
Por lo menos 25 blogs independientes, periodísticos y actualizados en forma regular están siendo producidos por escritores cubanos, según el análisis del CPJ. Existen, además, alrededor de 75 blogs independientes enfocados en noticias o reportajes que responden a intereses más personales o familiares. Además, unos 200 blogs con aprobación oficial son producidos por periodistas que trabajan en los medios estatales, según el sitio Web de la Unión de Periodistas de Cuba.
Carlos Lauría, coordinador senior del Programa de las Américas y María Salazar Ferro, investigadora asociada senior del Programa de las Américas, sitúan el nacimiento del movimiento blogger a comienzos de 2007, con Yoani Sánchez como pionera en un contexto de gran represión, ya que como explican en este interesante artículo, Cuba:
Es uno de los pocos países en las Américas con reglas específicas de censura que, como describe el Decreto 2009 de 1996, pretenden garantizar «los intereses de la defensa y la seguridad del país».
A pesar de todas estas cuestiones, el movimiento blogger en Cuba ha abierto un nuevo camino de esperanza para mejorar la libertad de expresión en Cuba, convirtiéndose en un ejemplo a seguir por otras comunidades igualmente reprimidas en sus posibilidades de informar y expresarse libremente.