La polémica sobre la función periodística de los blogs se ha visto reactivada recientemente en Francia a raíz de una operación de intoxicación orquestada por el blogger Arnaud Jeulin y la aparición de un nuevo sitio, No Press.
Jeulin revolucionó la blogosfera francófona con un post en el que difundía un falso rumor sobre la compra por parte de una gran grupo de comunicación del blog Presse-Citron. Una operación que le ha valido más críticas que aplausos, como las de Rue89 o Michel Leblanc, aunque a su artífice le haya reportado un momentáneo incremento de visitas en el blog.
La conclusión de los críticos es que este tipo de intoxicaciones, aunque pomposamente se quieran camuflar como demostraciones de marketing viral, sólo vienen a minar la credibilidad de los blogs como fuentes de información fiables y a apoyar los argumentos de quienes atacan la existencia del periodismo ciudadano.
Por otra parte, las relaciones entre bloggers y periodistas son también el objeto del nuevo sitio No Press, que propone el reconocimiento del estatus de blogger y la creación de un «carnet de blog» al modo del de prensa. No Press pretende reivindicar los derechos y la independencia de los bloggers e invita a todos ellos a sumarse a su petición colocando en sus respectivos blogs el sello identificativo que han creado.
Esta iniciativa ha sido recibida también con algunas críticas, incluso irónicas, pero en cualquier caso deja ver que la polémica sobre la función de los bloggers como periodistas sigue viva. Y lo seguirá mientras el periodismo ciudadano tenga defensores pero también detractores.
Vía | imédias