La introducción de la participación de la ciudadanía en el ámbito ciéntifico nos está ofreciendo una nueva mirada alrededor de la ciencia. Esta colaboración cuenta ya con casos especialmente destacados como el de Zooniverse, (@the_zooniverse), un proyecto fundamental de ciencia ciudadana. Zooniverse comenzó a funcionar en julio de 2007 poniendo en marcha el proyecto online de astronomía, Galaxy Zoo, un ejemplo de ciencia ciudadana que consiguió clasificar alrededor de un millón de galaxias. Tras esta experiencia han surgido numerosos proyectos más y uno de los últimos es Cyclone Center, (@CycloneCenter).
Se trata de un proyecto destinado a generar un registro sobre los ciclones, determinando patrones en la imágenes de las tormentas. Por lo que nos cuentan el ojo humano es una máquina especialmente apropiada para identificar patrones en las imágenes captadas por satélite de las tormentas. Este es un aspecto muy relevante en la conocida como «ciencia ciudadana», ya que esta colaboración voluntaria permite liberar a los científicos de la farragosa tarea de analizar datos pormenorizados de manera mecánica. La participación ha permitido que la gente interesada se adentre un poco más en un mundo muy desconocido como es de la ciencia y también ha permitido liberar a los científicos de estas tareas mecánicas pudiendo centrarse en el análisis preciso de estos datos recopilados de manera colectiva. Esta nueva distribución de tareas esta permitiendo acelerar tanto las investigaciones como la velocidad a la que encontramos respuestas en un mundo interconectado.
#Patricia is about to move ashore into Mexico. Strongest storm ever recorded by humans in w. hemisphere. pic.twitter.com/CbQsXbxKZm
— Cyclone Center (@CycloneCenter) octubre 23, 2015
A través de este programa los interesados podrán colaborar en el análisis de imágenes de satélite, para poder así predecir el comportamiento futuro de un ciclón. En su web podemos ver, en tiempo real, el número de Usuarios activos: 10,821, las Observaciones realizadas: 511723 o las Imágenes que se han analizado: 22156.
Los resultados obtenidos del análisis de estas imágenes servirá para crear una nueva base de datos de información sobre los ciclones, que ayudará a los climatólogos a predecir con mayor exactitud la intensidad y comportamiento de futuras tormentas.
TCOTD – Hurricane Wilma – Oct. 19 http://t.co/9uVo9PfNCu pic.twitter.com/CtlNlXTWYb
— Cyclone Center (@CycloneCenter) octubre 19, 2015
Si quieres participar solo tienes que entrar en la página y responder a unas sencillas preguntas. En este proyecto en concreto, se está utilizando una versión de la técnica de Dvorak para la clasificación de los ciclones tropicales utilizada desde finales de los 70. No olvidemos que la utilización de imágenes via satélite se puso en práctica a mediados de los 60, gracias a la aparición de los satélites geoestacionarios que orbitan la tierra a altitudes muy elevadas (~ 22.300 millas o 35.900 km), lo que les permite monitorizar los océanos para analizar la actividad de los ciclones tropicales.
Esta colaboración está permitiendo analizar miles de clasificadores que contribuirán a resolver las diferencias en el registro mundial de los ciclones tropicales y mejorar nuestra comprensión de cómo la naturaleza de estas tormentas puede haber cambiado a través del tiempo.
Imagen Portada: 5Oulscape en Flickr bajo licencia CC