[…] Quienes lo defienden hablan de «democracia informativa» y lo elevan a la categoría de «periodismo ciudadano», con el cual supuestamente -por primera vez en la historia- los temas de discusión no los elige el dueño de la empresa periodísitca sino los mismos usuarios.
¿Y quién garantiza que el que escribe el blog es quien dice ser, no está mientiendo o al menos sabe de lo que está hablando?, atacan los detractores, y afirman que al menos un medio se juega su buen nombre cuando se arriesga a publicar una noticia cuya veracidad no les consta.
Relatos como el de aquel iraquí que desde Faluya informaba la situación mientras el bloqueo estadounidense impedía cualquier acceso mostró el valor del blog como herramienta periodística, pero parece obvio que uno no puede pretender adquirir el paisaje informativo completo a través de un blog. […]
Vía | Bípedos depredadores